Aura es una mujer
Aura es una mujer feliz, así lo piensa mientras conduce camino de casa. En la radio una canción, en su pensamiento satisfacción. Le costó mucho llegar, tanto que no ha tenido tiempo de detenerse a celebrarlo. La autopista se presenta como una serpenteante procesión de luces rojas, paciencia, “mejor” piensa ella, podrá disfrutar mas de este instante de felicidad. A solas, como en realidad siempre estuvo.
Mete primera, avanza unos metros, frena de nuevo. Aura ve que son las en punto y pone las noticias “… 30 muertos en Irak… la amenaza nuclear…en el día del hambre… son 60 ya los desaparecidos del cayuco que… la apuñaló hasta matarla… despidieron al árbitro con botellas… premio a la selección de baloncesto…mal tiempo, lluvia… “ Sonríe, premian a quienes ganando millones cumplen con su obligación, extraño este mundo, de donde ella viene ya es un premio ganar 1€.
Pensaba entre metro y metro que la caravana avanzaba. Le pitaban impacientes los que le seguían, pero ella hacía caso omiso. No podía sentarse bien debido a la mutilación genital que sufrió de pequeña, poco iban a asustarle ya unos claxóns malsonantes. Recordaba que de donde venía apenas veía tres vehículos a la semana, jeeps militares, el de una ONG y la tartana de bus que pasaba los jueves.
De pronto le dieron el alto, no había percibido, absorta en sus pensamientos, de que atravesaba un control policial, más como los coches que le precedían avanzaban les seguió en la inercia. Mas a ella le detuvieron, una vez enseñado al agente su tarjeta de residencia, su permiso de trabajo y demostrado que el coche era suyo, prosiguió camino hasta que llegó a casa.
Aparcó su Seat 127 en el descampado, no lejos pastaban unas cabras, se detuvo a contemplarlas, a cambio de una su padre la dio en casamiento a su primo con 12 años.
Aquella bala de la guerrilla le dio la libertad y pudo escapar de aquella vida. Hoy hacía 3 años que llegó y se sentía orgullosa de si misma, sus dotes para el atletismo le permitieron abrirse camino y liberarle del yugo de la mafia que le embarcó. Sí, estaba dispuesta a celebrar su victoria ante la adversidad e iba a estrenar su movil para quedar con los compañeros del equipo.
.- Hola, soy Aura!
Mete primera, avanza unos metros, frena de nuevo. Aura ve que son las en punto y pone las noticias “… 30 muertos en Irak… la amenaza nuclear…en el día del hambre… son 60 ya los desaparecidos del cayuco que… la apuñaló hasta matarla… despidieron al árbitro con botellas… premio a la selección de baloncesto…mal tiempo, lluvia… “ Sonríe, premian a quienes ganando millones cumplen con su obligación, extraño este mundo, de donde ella viene ya es un premio ganar 1€.
Pensaba entre metro y metro que la caravana avanzaba. Le pitaban impacientes los que le seguían, pero ella hacía caso omiso. No podía sentarse bien debido a la mutilación genital que sufrió de pequeña, poco iban a asustarle ya unos claxóns malsonantes. Recordaba que de donde venía apenas veía tres vehículos a la semana, jeeps militares, el de una ONG y la tartana de bus que pasaba los jueves.
De pronto le dieron el alto, no había percibido, absorta en sus pensamientos, de que atravesaba un control policial, más como los coches que le precedían avanzaban les seguió en la inercia. Mas a ella le detuvieron, una vez enseñado al agente su tarjeta de residencia, su permiso de trabajo y demostrado que el coche era suyo, prosiguió camino hasta que llegó a casa.
Aparcó su Seat 127 en el descampado, no lejos pastaban unas cabras, se detuvo a contemplarlas, a cambio de una su padre la dio en casamiento a su primo con 12 años.
Aquella bala de la guerrilla le dio la libertad y pudo escapar de aquella vida. Hoy hacía 3 años que llegó y se sentía orgullosa de si misma, sus dotes para el atletismo le permitieron abrirse camino y liberarle del yugo de la mafia que le embarcó. Sí, estaba dispuesta a celebrar su victoria ante la adversidad e iba a estrenar su movil para quedar con los compañeros del equipo.
.- Hola, soy Aura!
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